El gobernador bonaerense resaltó las tareas de cuidado a los vecinos y reconstrucción de distintos espacios que fueron azotados por el diluvio y viento en esa región.
El gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, visitó General Alvarado, reuniéndose con el intendente Sebastián Ianantuony para coordinar acciones inmediatas de asistencia frente a los considerables daños causados por la fuerte tormenta que azotó la localidad de Miramar.
«Hemos puesto a disposición del municipio diferentes instrumentos para colaborar con las tareas necesarias y asistir a los damnificados», destacó el mandatario. Subrayó, además: «Como siempre hemos hecho ante estas situaciones, la provincia de Buenos Aires asume el compromiso de estar presente para ayudar a los vecinos y vecinas afectadas».
Para fortalecer las operaciones de socorro, la Provincia ha desplegado personal de la Policía y de Defensa Civil, junto con tres autobombas 4×4, seis camionetas, motosierras y equipamiento esencial para despejar las calles afectadas por árboles caídos durante el temporal.
El Ministerio de Desarrollo de la Comunidad intervendrá con la entrega de materiales de construcción como chapas, tirantes y clavaderas, además de elementos esenciales para el bienestar de los afectados, como colchones, frazadas y tres toneladas de alimentos. Asimismo, el Ministerio de Salud proporcionará apoyo especializado en salud mental para acompañar a las familias más afectadas.
Ante la magnitud de la situación, el Banco Provincia también ha activado una línea de créditos con tasas especiales destinada a personas, comercios, microemprendimientos y empresas afectadas por eventos naturales adversos.
«Frente a estas situaciones, es el Estado el que llega para dar respuestas con asistencia directa y acompañamiento», concluyó Kicillof, reafirmando el compromiso del gobierno en la recuperación y reconstrucción de la región afectada.