El presidente dialogó con la jefa del Comando Sur en Tierra del Fuego, donde puso el foco en formar una alianza estratégica.
El presidente Javier Milei viajó a Tierra del Fuego para encontrarse con la general del Ejército norteamericano y jefa del Comando Sur, Laura Richardson, en un vuelo que se retrasó porque debió hacer una escala técnica que no estaba prevista en Río Gallegos.
La idea del mandatario nacional era encontrarse cerca de las 21 con la enviada de Joe Biden, pero terminó arribando a Ushuaia pasadas las 23:30.
Milei agradeció a Richardson “por el apoyo que el gobierno de los Estados Unidos ha demostrado este nuevo gobierno”.
“Más allá de los vaivenes políticos y diplomáticos que han tenido los gobiernos de distintos signos políticos tanto aquí como allá los argentinos como pueblos tenemos una afinidad natural con los Estados Unidos”, resaltó el mandatario.
Y agregó: “Ambos pertenecemos a la tradición occidental con una cultura una historia política y una forma de vivir en sociedad en buena parte compartida una tradición que tiene en su base las ideas de la libertad la defensa de la vida la libertad y la propiedad privada que fueron el estandarte de los padres fundadores de ambas naciones cuando diagramaron sus primeras constituciones es una tradición que debería darnos orgullo porque estas ideas enriquecieron a todos los países que las abrazaron y permitieron que la humanidad evolucionara pasos agigantados en los últimos 300 años pasando de tener el 95% de la población mundial en la pobreza extrema en 1810 a solamente el 5% en el 2020”.
“Tanto el pueblo norteamericano como el argentino tienen en común que cuando las adoptaron pudieron emprender las expansiones territoriales más importantes de sus historias a la altura de la ambición y vitalidad de sus pueblos, afirmó Milei.
Si bien estaba previsto que saliera a las 17:30, el avión de la Fuerza Aérea salió desde Aeroparque a las 18:40 y debió hacer una parada técnica en Río Gallegos, Santa Cruz, la cual no estaba prevista.
A las 22:10 finalmente partió rumbo a Tierra del Fuego a donde arribó una hora y media más tarde.
Pese a la espera, el Presidente se reunió con Richardson para dar una nueva muestra de sintonía con el gobierno de los Estados Unidos.
El escenario elegido no fue casual, ya que Estados Unidos mira con desconfianza el avance de China en la región y en la zona sur de América.
El Presidente llegó a la provincia sureña junto al ministro de Defensa, Luis Petri, y el del Interior, Guillermo Francos, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y Posse, a bordo de un avión de la Fuerza Aérea, luego de que el viaje se confirmara este mediodía.
En la ciudad lo esperó una protesta organizada por diferentes sindicatos en la plaza