En el marco del Día Internacional contra el Acoso Escolar, el Gobierno porteño apunta a construir espacios de respeto, confianza y libres de agresión.
Convivir con otros implica un aprendizaje y un proceso donde los referentes adultos de la familia y de la escuela tienen un rol fundamental para generar espacios de confianza, diálogo y escucha.
En este sentido, desde el Ministerio de Educación de la Ciudad buscan sensibilizar y generar conciencia sobre una temática que nos compromete e involucra como comunidad educativa, como es el acoso escolar.
Con este objetivo, durante esta semana se desarrollan diferentes propuestas pedagógicas para reflexionar, trabajar y elaborar producciones dentro del aula con las y los estudiantes, talleres con familias y otros actores de la comunidad.
El acoso escolar representa un sufrimiento para todos los involucrados y como adultos debemos trabajar para promover vínculos saludables.
“La familia y la escuela deben aliarse desde la colaboración, cooperación y el mutuo compromiso para mejorar el clima escolar y resolver problemas comunes que afectan a toda la comunidad educativa, como lo son el acoso escolar y la agresión entre pares”, observaron desde el GCBA.