“La educación es una prioridad durante todo el año y es la gran apuesta de la Ciudad para multiplicar las oportunidades de crecimiento para todos”, sostuvo la Vicejefa de Gobierno, al visitar el programa en el que se anotaron más de 27 mil chicos.
La vicejefa de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Clara Muzzio, participó de actividades junto a alumnos de nivel inicial que participaron del Programa Escuela de Verano. Estuvo acompañada por la Ministra Educación del GCBA, Mercedes Miguel y por la Directora General de Escuelas Abiertas del GCBA, Teresa Patronelli.
Escuela de Verano es un programa que lleva adelante el GCBA donde los estudiantes pueden seguir aprendiendo en espacios que favorecen la inclusión y el trabajo grupal a través de propuestas artísticas, expresivas, culturales y deportivas.
Además los estudiantes de nivel secundario tienen la posibilidad de cursar y acreditar materias previas adeudadas ya que el Programa forma parte de la Red de Fortalecimiento. “Acá tienen un lugar donde pueden compartir, relacionarse y seguir aprendiendo a partir de propuestas expresivas, culturales y deportivas” subrayó Muzzio.
Este año se inscribieron más de 27 mil alumnos que acuden a centros educativos estatales y algunos de los 5 predios deportivos. “Son más de 100 las escuelas públicas que mantienen abiertas sus puertas en verano para seguir educando a los chicos de la ciudad” destacó la vicejefa de Gobierno.
Los chicos participan de actividades articuladas con: Centro Cultural San Martín, Centro Cultural Recoleta, Museo Quinquela Martín, El Anfiteatro de Parque Centenario, Espacio Incaa en el cine Gaumont, Fundación Proa, Teatro San Martín, Usina del Arte y Baficito.
La Escuela de Verano cuenta también con tres establecimientos de Educación Especial y tres escuelas hospitalarias en los nosocomios Gutiérrez, Garrahan y Elizalde.
Por su parte, la Ministra de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, Mercedes Miguel, expresó: «La Escuela de Verano busca potenciar conocimientos y brindar más oportunidades de aprendizaje, y al mismo tiempo fomentar el disfrute y la exploración de nuevas experiencias. Durante las vacaciones nuestras escuelas se transforman en espacios lúdicos donde chicos y chicas de todas las edades se divierten y siguen aprendiendo».
